Recientemente surgió a la luz el caso de un individuo en Estados Unidos que cometió un fraude de 10 millones de dólares a las plataformas de streaming con cientos de miles de canciones creadas con IA que hizo pasar por legítimas. Esa es una muestra de cómo las regalías reales de artistas legítimos pueden acabar en las manos equivocadas. La realidad es que, a pesar del crecimiento exponencial del consumo de música en plataformas digitales, muchos músicos no reciben una compensación justa por su trabajo.
Existen varios factores que obstaculizan la distribución adecuada de las regalías. Aquí abordamos cada uno de estos.
- El fraude en la gestión de regalías
La promesa del streaming de democratizar la industria musical se ha complicado por la presencia de intermediarios. Numerosos artistas, especialmente los independientes, son víctimas de fraudes en la gestión de sus regalías. Empresas y personas sin escrúpulos proliferan en este ecosistema, aprovechándose de la complejidad del sistema y de la falta de conocimiento de muchos músicos.
Estos estafadores suelen ofrecer servicios de gestión de derechos de autor a cambio de altas comisiones, prometiendo maximizar los ingresos de los artistas. Sin embargo, una vez que obtienen el control de los catálogos musicales, desaparecen con el dinero, retienen muy altos porcentajes por concepto de comisiones o simplemente manipulan los números. Y, bueno, a esto hay que añadir la piratería, un fenómeno que no se ha erradicado por completo.
Consejos para los músicos:
- Investiga exhaustivamente a cualquier empresa o persona que ofrezca servicios de gestión de derechos de autor.
- Solicita referencias de otros artistas.
- Exige contratos claros y transparentes, que especifiquen los servicios prestados, las comisiones cobradas y los plazos de pago.
- Las grandes sociedades de gestión de derechos de autor son la mejor alternativa, porque están establecidas y tienen mayor poder en la industria debido al número de artistas que representan. En México SACM y en Estados Unidos ASCAP, SESAC o BMI son muy buenas opciones.
- El rol de las disqueras
Si bien las plataformas de streaming han revolucionado la forma en que consumimos música, su modelo de negocio ha generado una gran controversia. Spotify, por ejemplo, distribuye los ingresos generados por las suscripciones a través de un fondo común, lo que significa que los artistas con catálogos más grandes o con acuerdos más ventajosos con las discográficas suelen recibir una mayor proporción de las regalías. Las grandes discográficas mantienen un poder considerable en la industria y negocian acuerdos que les permiten quedarse con una parte significativa de los ingresos generados por los artistas que representan. Esta situación crea una especie de «caja negra» en la que es difícil para los músicos rastrear el destino de sus regalías.
- La metadata
La metadata es la información asociada a una grabación musical, como el título de la canción, el nombre del artista, el álbum, el género, etc. Una metadata precisa y completa es fundamental para que las plataformas de streaming puedan identificar correctamente las canciones y atribuir las regalías correspondientes a los artistas y compositores. Si tu metadata está incompleta o contiene información errónea, no recibirás las regalías que deberías.
- La complejidad del sistema
La industria de la música nunca ha sido sencilla de entender para los músicos y artistas, y al día de hoy sigue siendo un sistema complicado de entender. La burocracia y la complejidad del sistema desaniman a muchos músicos, especialmente a los independientes, a dedicar el tiempo y los recursos necesarios para reclamar sus derechos, algo que no debería suceder.
- Falta de conocimiento
Todos los músicos, compositores y cantantes deben educarse en todas estas cuestiones, y en ocasiones hace falta la asesoría de un abogado especializado en derechos de autor. Desgraciadamente esto es un peso más que se agrega a todos los otros aspectos que implica una carrera musical. Pero si tienes un equipo, incluso solo un manager, es posible delegar este trabajo y lograr una buena educación respecto a tus derechos.
A pesar de la complejidad de la industria, es fundamental recordar que tienes derecho a una compensación justa por tu trabajo. Navegar este complejo laberinto de regalías puede parecer abrumador, pero con información, herramientas y una actitud proactiva, puedes tomar el control de tu carrera.
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