Intocable demostró una vez más que son los máximos exponentes de la música norteña, y con sus conocidos temas, los originarios de Zapata, Texas conquistaron a los asistentes de la Arena Ciudad de México.
Aunque al principio hubo molestias por parte del público, ya que el escenario se iluminó hasta las 9:22, los acordes de «Me equivoqué contigo» y «Mágico amor» causaron que el pasado quedara atrás, y el aplauso se hizo escuchar para Intocable.
En el marco de festejos por los 21 años de trayectoria de Intocable, la noche se tornaría mágica y llena de música al interpretar clásicos como «Y todo para qué», «Llévame contigo», «Eres mi droga», «¿Dónde estás?», «Amor maldito» y «Fuerte no soy». Los fanáticos siguieron entonando los coros de los temas que inundaban a la Arena Ciudad de México, sobre todo con «Soñador eterno», «Fuerte no soy», «Estás qué te pelas», «Sueña», «Eso duele» y «Aire».
La fiesta tenía que llegar a su fin, pero no sin que Intocable hiciera gozar a la audiencia con «Hay ojitos», incluido en el disco en el que rindieron tributo a Los Relámpago del Norte; y canciones de sus producciones más recientes, como «Dímelo», «Te amo (Para siempre)» y «Culpable fui, culpable soy», ésta última de su material titulado «En peligro de extinción».
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